My Work

Tuesday, August 04, 2015

SILENCIO

Me gusta guardar silencio.
Luego abro el cajón donde lo tengo y lo dejo escapar.
Lo dejo correr por toda la casa.
Se libera. Se propaga. Se vuelve aire.
Lo oigo respirar con el viento cuando abro las ventanas.
Lo oigo llenar los rincones, zambullirse en mi sangre, agolparse en mis párpados y en mis sienes.
Lo siento inundar como droga la red cerebral de mi espacio y transformarla en tiempo.
Lo veo flotar y posarse sobre la realidad.
Los objetos sienten su presencia, se sostienen diferente cuando están envueltos de silencio.
Es el vacío que se dibuja alrededor de las cosas. 
Es la ausencia que acompaña a las manecillas del reloj.
Es el compás invisible. La pausa en el caos.
Un agujero en el ruido. Un respiro entre los huecos del sonido.
Es el infinito en mi palma y la eternidad en mi cabeza.
Es música antes de nacer.
El silencio es la forma más bella del tiempo.
Para guardarlo sólo lo levanto de mi lengua y lo meto de nuevo en su cajón.
Algunas veces lo llevo conmigo cuando salgo, pero no es seguro.
La gente no parece entenderlo. Se incomodan. Insisten en romperlo cuando lo notan.
Peor aún si la policía te atrapa con él, no saben respetar nada.
Es un valor raro. Más raro aún quien lo aprecia. 
El silencio es la partícula elemental del tiempo.
Por eso lo que más me gusta es guardarlo y dejarlo escapar. 


1 comment:

Unknown said...

ME ENCANTA